Ante la llegada de un bebé todo es ilusión y felicidad, pero es posible que no todos los miembros de la familia lo sientan de esta manera. Me refiero a esos niños que hasta entonces han sido hijos únicos y han disfrutado de todo el cariño, tiempo y atención de sus padres.
Sin embargo, cuando un nuevo hermanito aparece en escena, es inevitable que los papás se vuelquen con él, ya que necesitará muchos más cuidados. Ante esto, lo más normal es que el primogénito sienta celos y tenga la sensación de que ha perdido parte del cariño de sus padres.
Como consecuencia, culpará a su hermano de ello, ya que sentirá que éste ha venido para ocupar su lugar y que desde su llegada la familia le presta menos atención y está menos pendiente de él.
Lo más habitual en esta situación es que el niño intente hacer una llamada de atención con diversos comportamientos: desobediencia, rabietas, conductas regresivas (como volver a pedir el chupete)... todo ello en su afán de hacerse notar.
Algunas pautas que los padres deben seguir para evitar todo esto son:
- Explicarle y hacerle comprender que el bebé necesita más cuidados debido a su corta edad.
- Evitar las comparaciones entre los hermanos.
- Hacerle ver que su nuevo hermanito es un amigo al que él también debe cuidar y con el que podrá jugar en un futuro.
Por último, es importante recordar que este comportamiento es de lo más normal en los niños y que además suele darse durante un periodo breve.
¿Qué tal llevaron vuestros hijos la llegada de un nuevo hermanito? ¿Qué pautas seguisteis vosotros para reducir sus celos?
Sin embargo, cuando un nuevo hermanito aparece en escena, es inevitable que los papás se vuelquen con él, ya que necesitará muchos más cuidados. Ante esto, lo más normal es que el primogénito sienta celos y tenga la sensación de que ha perdido parte del cariño de sus padres.
Como consecuencia, culpará a su hermano de ello, ya que sentirá que éste ha venido para ocupar su lugar y que desde su llegada la familia le presta menos atención y está menos pendiente de él.
Lo más habitual en esta situación es que el niño intente hacer una llamada de atención con diversos comportamientos: desobediencia, rabietas, conductas regresivas (como volver a pedir el chupete)... todo ello en su afán de hacerse notar.
Algunas pautas que los padres deben seguir para evitar todo esto son:
- Explicarle y hacerle comprender que el bebé necesita más cuidados debido a su corta edad.
- Evitar las comparaciones entre los hermanos.
- Hacerle ver que su nuevo hermanito es un amigo al que él también debe cuidar y con el que podrá jugar en un futuro.
Por último, es importante recordar que este comportamiento es de lo más normal en los niños y que además suele darse durante un periodo breve.
¿Qué tal llevaron vuestros hijos la llegada de un nuevo hermanito? ¿Qué pautas seguisteis vosotros para reducir sus celos?
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